CONSULTORIO SENTIMENTAL DEL DOCTOR D.E.S. AMOR: ESTELA PLATEADA.

CONSULTORIO SENTIMENTAL DEL
DOCTOR D.E.S. AMOR

Doctor DES amor:

Mi nombre era Norrin Rad y tengo un problema galáctico. Mi jefe, el todopoderoso Galactus, me creó con una apariencia metálica, y con grandes poderes. Yo soy el encargado del catering de mi jefe, y tengo que buscarle la comida constantemente, y el tío tiene un hambre insaciable. Así que cuando no consigo sus víveres, me utiliza de vibrador (fue la primera vez me di cuenta del por qué de mi apariencia física y mis poderes). Es mucho más fuerte que yo, así que sólo me queda un arma y es convencerle de que no lo haga más, que es que siempre voy oliendo mal y no hay quien se acerque a mí. ¿Cómo podría convencerlo?

Estimado paciente:

Su problema es más común de lo que pueda pensar... Bueno, no es que haya devoradores de mundo en todo bloque de pisos usando a su heraldo de vibrador, pero vamos, que es común el que, en una pareja, uno de los miembros (con perdón) use de objeto al otro miembro (con perdón). No obstante, se me ocurren varias soluciones a su problema:

1) Déjese barba de varios días, y deje de afeitarse la cabeza. Así, pinchará, y seguro que deja de resultarle tan agradable a su jefe. Esta opción tiene el inconveniente de que puede descubrir que a su jefe le va la marcha... por lo que prepárese para añadir a la sangre a su lista de fluidos que le recubren al final de cada experiencia.

2) Háblele de la sexualidad en la Tierra. Usted sabe cómo es, y sabe que eso que hace su jefe, no lo hacen los Devoradores de Mundos heterosexuales. Aunque ya es algo muy normal en nuestro planeta y que no tiene nada de malo, todavía hay sectores que usan el tema de la homosexualidad como mofa o insulto. Píquele en su orgullo hetero. Esta opción también tiene el inconveniente de que su jefe descubra su verdadera sexualidad y salga del armario. Imagínese que le da por cambiar de atuendos y tenemos un Galactus-loca... Uf, yo prefiero no imaginármelo.

3) Esta es una variante de la primera, pero tiene un efecto médico. Unte su cuerpo con las guindillas más picantes que encuentre. Esto hará que le pique un poco a su jefe, pero sobre todo, hará que tenga un ataque de hemorroides como nunca antes lo ha tenido. Así, aunque le guste el rollito pique, el efecto obstrucción hemorroidal impedirá que le use durante una temporadita. Con suerte, asociará su uso con las crisis y dejará de usarle.

Siempre queda la opción del diálogo directo pero... estas opciones son más divertidas.